En Otros Tiempos Difíciles – Ensayo Fotográfico

junio 17, 2020
Ensayo Fotográfico: En otros tiempos difíciles | Foto: Jorge Luis Toledo, 2020

 

Ensayo Fotográfico: En otros tiempos difíciles | Foto: Jorge Luis Toledo, 2020
Ensayo Fotográfico: En otros tiempos difíciles | Foto: Jorge Luis Toledo, 2020

En Otros Tiempos Difíciles

H.P.

Estos son otros tiempos
difíciles,
nadie te pide la cabeza,
ni las extremidades, ni el corazón, ni la lengua.
Estos son otros tiempos,
donde el ventrílocuo cansado de tanta juerga,
de tanto ir y venir
abandona su indeseable creación.

Estos son otros tiempos
difíciles,
te han impuesto nuevas batallas:
la palabra estéril, la sangre helada, los órganos acalambrados,
el puño suspendido y la mirada viscosa.

Estos, evidentemente,
son tiempos
en los que sin entregar nada
puedes endeudar hasta los hongos de los pies.

Son tiempos viriles y cobardes
de villanía y heroicidad
donde la lombriz que carcome el viejo cadáver sonríe
porque construye.
Y la mano ya lavada siempre se ensucia.
Luego escribe con la mayor de las elegancias un poema lleno de consignas
en honor a la rosa, al arma, la reja, el calabozo, la mordaza,
el grito, la tortura, la victoria, la desfalleciente ideología,
el sacrificio, y el hombre m-e-d-i-d-a- d-e -t-o-d-a-s-l-a-s-c-o-s-a-s.

Alguien firmó en la calle por la que pasaba ayer:
“Lo difícil de cualquier tiempo es vivirlo”
Sin embargo, insisto:
Lo difícil de este tiempo es la sensación de que pasa,
que vivimos incrustados en las palmeras
y derritiéndonos en el asfalto.
A la espera de la postal de mayo, o abril, o julio o enero:
“¡Felicidades mamá!”
“¡Viva la Patria!”
“¡Seguiremos venciendo con paciencia, esfuerzos y heroísmo!”

Si hay Historia es porque hay relato,
porque los muertos siguen empujando la noria con su aliento.
Y los vivos bebemos su bilis.

Este, evidentemente, es un tiempo que ha de ser vivido.
Por eso vomito esta rabia silenciosa, causada por el menudeo incesante que se agita a mi alrededor:
¡Vendo cortinas, palo de trapear, veneno pa’ las cucarachas!
¡Dulces calientes y pizza!
¡Vendo tartaletas y salfumán!
¡Chancletas pa’ la niña y pa’ la grande!

R.R. H.H.

 

Literatura VI

Un poema para ellos,
al ritmo de tambores
y sinfonías de pasos,
ángeles caídos
bebiendo vino barato o algo peor
con las alas dispersas sobre las sillas,
atreviéndose a conversar
soñar
escribir sonrisas
buscando en las calles
los rostros de los dioses
al doblar las esquinas
hacia el fondo de la noche
para escapar
siguiendo el rastro de plumas
en el cénit,
evitando el suicidio y la locura.
Un poema para ellos,
al ritmo de tambores
y sinfonías de pasos.

Boris M. Díaz

 

El Anciano

Estoy parado en esta esquina –
entre la cordillera y el mar,
entre el sur y el desierto.
Soy pobre, pero no puedo vender mi pobreza,
ni cambiarla por un augurio.
Seguramente estoy esperando algo
parado en esta esquina del mundo,
pero ya no sé qué. Quisiera
ser una chispa en algún fogón,
en alguna cocinería, en el campo.
Pudiera ser yo el campo, o el fogón
o la chispa; pero eso no lo entendería
mi compadre: se lo llevaría otro.
Ay, muchos compadres necesitan comer –
y yo no puedo transformarme en nada,
ni hacer una promesa que nadie cumpliría.
Ahora estoy parado en esta esquina –
entre una rodilla rota y un latón de basura,
entre un paredón y un diente de menos.
Hablo con calma, solo; ni siquiera puedo ser
un mendigo: no tengo dones para eso.

Ángel Escobar

 

En tiempos difíciles

(…)
Y finalmente le rogaron
que, por favor, echase a andar,
porque en tiempos difíciles
ésta es, sin duda, la prueba decisiva.

Heberto Padilla

Boletín DK