La Insoportable Levedad del Ser
La insoportable levedad del ser de Milán Kundera ha pasado en el tiempo como un libro que puede ser considerado histórico-filosófico. Lamentablemente, el segundo aspecto casi nunca es notado si la lectura que se hace de él es superficial.
Desde el sentido nietzscheano, es posible realizar una breve interpretación de los personajes principales de la historia: Tomás y Teresa. Es decir, relacionando la realidad de la novela con la filosofía contemporánea.
Lo Apolíneo y lo Dionisíaco
Tomás estuvo casado y tuvo un hijo con su mujer, de la cual se divorció. Luego veía como una carga tener que mantener al hijo y se comportó como muchos padres hacen, es decir, también se divorció de su hijo.
En este momento de su vida tenía varias amantes con las cuales no tenía más que -como él mismo define- “una amistad-erótica”, sin compromiso. Un día visitó otra ciudad donde conoció a Teresa, pasado un tiempo ella lo visita y los dos se enamoran y Tomás se casa con ella pasando así siete años de lo que puede ser llamado completa cordura, en el sentido de que le fue fiel a ella y cumplía con todos los valores morales y éticos dentro del matrimonio. (Kundera, 2002)
Por toda la explicación anterior y visto ahora como lo vería Nietzsche, este personaje se puede caracterizar como un espíritu dionisíaco, pues vive en una total exaltación entusiasta de la vida tal como es, sin disminución, sin excepción y sin elección. Es decir, es la exaltación infinita de la vida. Donde existe una aceptación total e integral de la vida, la cual se transforma de dolor en alegría, de lucha en armonía.
Por lo tanto, hay una total negación de todo límite humano en Tomás ya que sin tanta explicación le gusta disfrutar de los placeres humanos. Pero a partir de que conoce a Teresa se convierte en un espíritu apolíneo pues se encuentra en una vida conservada, siempre equilibrada, astuto y sensato. Su actitud ante la vida es resignada. (Ver más en Abbagnano, 2011)
Teresa es una muchacha que ha tenido que pagar toda su vida por el error que cometió su madre con el padre, teniendo en mi opinión una infancia muy desagradable. Por lo tanto, su existencia en sí ha sido constantemente desdicha y llena de dolor por las condiciones objetivas en las que vivía. Luego cuando conoce a Tomás su vida cambia, pues, aunque sabe que constantemente la engaña, ella se resigna por el temor que tiene a perderlo, pero a la vez es posible observar que ella piensa que sin él no va a tener más voluntad de vivir y por tanto de forma implícita y explícita también tiende a negar y suprimir toda su realidad.
En este personaje, Nietzsche se manifiesta de varias formas que serán nombradas y explicadas a continuación.
La idea de Amor Fati, la cual traduciéndose quiere decir amor al destino. En Teresa, esta noción nietzscheana puede verse junto con la del Eterno Retorno en la historia de su vida. Desde que nació ha vivido en un estado de sumisión a su madre a quien tenía una especie de amor-odio por las situaciones vergonzosas que le hacía pasar. Luego cuando conoce y se casa con Tomás pasa por la situación incómoda de saber que este le es infiel, pero no es capaz de dejarlo y ahí es cuando se ve la sumisión que le tiene a ese hombre a quien ama. En términos filosóficos y en especial nietzscheanos primero es expresado el Eterno Retorno pues lo mismo que planteaba este filósofo la vida es un constante ciclo, en los que los estados se repiten miles de veces (el presente se convierte en pasado, el futuro será presente y posteriormente pasado) (Nietzsche, 2009).
….en sentido nietzscheano el ser humano por naturaleza es contradictorio, pues todos somos predominantemente apolíneos o dionisíacos.
Luego, es posible ver simultáneamente que en Teresa se expresa Amor Fati porque en ella se ve su grandeza y la fórmula seguida por Teresa que no es más que no querer algo distinto de lo que es, ni el futuro, ni el pasado. No solo soportar lo que es necesario, sino que eso implica también amarlo. Este amor es lo que libera al individuo de la esclavitud del pasado, ya que para él, lo que ha sido se ha transformado en aquello que quería que fuera; y ese es el sentimiento que experimentó Teresa cuando conoció a Tomás pues lo vio como la escapatoria a la vida que tenía junto a su madre a la que ya estaba acostumbrada.
Viendo al personaje de Teresa desde la perspectiva de Nietzsche puede clasificarse de apolíneo, ya que ella llevó durante toda la novela una vida equilibrada, lúcida, sensata y astuta; pues como se demuestra en el transcurso de la historia, Teresa acepta de una forma resignada la vida, a la actitud del que ve en ella la condición negativa de los valores de bondad y perfección que constituyen su negación.
Pero hay un momento en el que decide ser de una forma diferente para probar los placeres de la vida en el cual llega a mostrar un lado desconocido para ella y es el de ser dionisíaca porque acepta total e íntegramente la vida, en la cual hay una transformación del dolor en alegría, de lucha en armonía y con una renovación profunda de la tabla de valores morales y negando todo límite humano, es el momento en el que ella decide probar a tener relaciones sexuales sin amor, ya que ella era de la concepción que para tenerlas debía existir entre la pareja lo más importante: AMOR. Al hacer esta prueba ella se sentía mal ya que iba en contra de sus valores morales y éticos.
A modo de conclusión es posible decir que en sentido nietzscheano el ser humano por naturaleza es contradictorio, pues todos somos predominantemente apolíneos o dionisíacos. No obstante, siempre llega un momento en que dejamos al descubierto nuestro “lado salvaje” y es cuando aparece en el caso de los apolíneos el lado minoritario que es el dionisíaco y viceversa.
Referencias
Abbagnano, N. (2011). Historia de la Filosofía (tomo lll). La Habana: Félix Varela.
Kundera, M. (2002). La insoportable levedad del ser. D.F México: Fábulas.
Nietzsche, F. (2009). Así habló Zaratustra. Madrid: Alianza Editorial.