Más de 500 personas murieron el martes en un ataque aéreo israelí contra el hospital baptista Al-Ahli de Gaza, según declaró a Anadolu el portavoz del Ministerio de Sanidad, Ashraf al-Qudra.
Naciones Unidas señaló que hoy también hubo un ataque israelí contra una de sus escuelas utilizada como refugio.
Por su parte, el ejército israelí dijo que aún estaba «aclarando todos los detalles» sobre los informes de los ataques tanto al hospital como a la escuela.
Las autoridades sanitarias de Gaza afirman que hasta el momento al menos 3.000 personas han muerto en el intenso bombardeo israelí de 11 días de duración desde que los militantes de Hamás atacaron Israel el 7 de octubre, matando a más de 1.300 soldados y civiles.
La noticia de la explosión en el hospital se produjo en vísperas de la visita a Israel del presidente estadounidense, Joe Biden, el miércoles, y de la visita del canciller alemán, Olaf Scholz, el martes.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, declaró: «No es aceptable atacar un hospital». Egipto denunció el ataque «en los términos más enérgicos».