No dogs or Italians allowed

enero 31, 2024
No dogs or Italians allowed
No dogs or Italians allowed, 2022.

Dir: Alain Ughetto. Francia/Italia/Suiza. 2022. 70 mins.

No dogs or Italians allowed es una peliculita sencilla. Bien sencilla en sus maneras y en su propuesta. Pero no por ello, menos importante en el tema que aborda, ni superficial en la magnitud del mensaje que propone.

Esta obra de Alain Ughetto que ronda los 70 minutos, se distingue por su uso del stop motion y modelado con plastilina, vehículos que facilitan la transmisión de un mensaje esencial sin sobrecargarlo de recursos innecesarios.

El filme de Ughetto está basado en hechos reales y sigue la historia de su familia en las montañas del Piamonte, noroeste de Italia, a principios del siglo XX. Para lograr ese acercamiento y tocar la más íntima fibra familiar, Alain interactúa con los personajes usando sus manos, y conversando con ellos, fundamentalmente con su abuela Cesira (Ariane Ascaride), con quien urde un relato conmovedor y personal.

La dimensión personalista e íntima se entremezcla de manera natural con un contexto sociopolítico más amplio, brindando una visión fragmentada y trágica de una Europa no muy lejana. Una Europa con ansias bélicas que precisamente veía como ni perros, ni italianos eran permitidos en algunos recintos franceses. Además, la historia escrita por Alexis Galmot, Anne Paschetta y Alain Ughetto también retrata temas como las crisis económicas, el hambre, la locura, la desesperación y, por encima de todo la esperanza.

Enfrentados a la dura realidad de la vida en su aldea, Ughettera, y a la atracción del trabajo en otros lugares, Luigi (Stefano Paganini) decide emigrar a Francia para laborar en proyectos de construcción de túneles y carreteras, lo que cambia el curso de la historia familiar.

Tras años de ir y venir, la gran familia Ughetto logra encontrar un pedazo de tierra en Francia.

La esperanza queda representada en esa finca en la que permanecen durante la Segunda Guerra Mundial, en la que son objetos de violencia, sobreviven bombardeos y ven la muerte de sus seres queridos. Pero allí es donde habían querido estar, en su “Paraíso”.

A pesar de las adversidades, incluyendo los estragos de ambas guerras mundiales, la historia equilibra la tragedia con momentos de alivio lúdico, detalles afectuosos y bromas recurrentes.

No Dogs or Italians Allowed ofrece una reflexión simplificada pero hoy más que necesaria. Alain dialoga con sus personajes, quienes son al mismo tiempo parte de su ser, su familia. Este diálogo, lejos de ser un monólogo cerrado, se presenta como una forma de examinar el pasado, intentando comprender nuestras decisiones a través de las vivencias de nuestros padres y abuelos.

En una Europa que actualmente retoma discursos nacionalistas y patriarcales, No Dogs or Italians Allowed representa un soplo de aire fresco, desordenando algunas convenciones establecidas. La astucia de sus personajes logra vencer la maldad intrínseca de las figuras opresivas de la Iglesia, el fascismo italiano, la discriminación, la precariedad económica y la desesperanza.

Quizás en eso radica su universalidad y su mayor ventaja, en que no es una película manifiesto, ni una obra nihilista. Es sencilla y llanamente, el intento de Alain Ughetto por entender, desde la arcilla, cómo el mundo ha producido su presente.

Responder

Your email address will not be published.

Boletín DK